
El aumento de los costes de construcción y de los tipos hipotecarios, la oferta limitada y el incremento de la compra de vivienda como inversión han provocado niveles de precios desorbitados en algunos países de la UE.
Hungría registró el mayor aumento de precios, con viviendas que cuestan tres veces más que en 2015. Hoy en día, un apartamento en la capital del país, Budapest, tiene un precio medio de entre 250.000 y 1,5 millones de euros.
A Hungría le sigue Islandia, donde los precios son aproximadamente 2,5 veces superiores a los de 2015. En la región de la capital, en Reikiavik y seis municipios de los alrededores, las viviendas son las más caras, con precios medios de compra de unos 558.000 euros.
Según el Banco de Islandia, como la oferta ha crecido y la demanda se está suavizando, los precios de la vivienda están aumentando a un ritmo más lento, aunque la inflación interanual del precio de la vivienda seguía siendo del 8% en marzo.
En el resto de Europa también se ha producido un aumento considerable de los precios de la vivienda en los últimos 9 años. En Lituania, Portugal, la República Checa, Bulgaria, Estonia y Polonia los precios aumentaron más del doble.
Mientras tanto, al final de la lista se encuentra Finlandia, donde los precios de la vivienda no son sustancialmente superiores a los de hace casi diez años. Sin embargo, hay grandes diferencias entre el coste de las viviendas en las zonas rurales y en Helsinki, por ejemplo.
Según un reciente informe de Global Property Guide, es probable que la recesión del mercado inmobiliario finlandés, que comenzó en 2021 y vio cómo los precios se desplomaban un 14% anual, haya tocado fondo.
Esperan que la recuperación económica en curso respalde un aumento gradual de los precios de la vivienda, principalmente de nueva construcción, ya que se prevé que el precio de las viviendas de segunda mano aumente solo marginalmente entre un 1% y un 3% este año. Los pisos de segunda mano tienen un precio medio de 4.612 euros por metro cuadrado, lo que eleva el coste de uno de 75 m2 a 345.900 euros, pero en Helsinki podría ser más bien de 400.000 - 500.000 euros.
Eurostat no dispone de datos sobre los precios de la vivienda en Grecia, pero según el Índice de Inmuebles Residenciales del Banco de Grecia, los precios están justo por encima de su nivel de 2008 en las zonas urbanas.
Fuera de la UE, en Turquía los precios son 17 veces superiores a los de 2015. En Estambul, un apartamento de dos dormitorios suele costar hoy unos 120.000 euros. (Puede parecer una buena oferta en comparación con los precios de Europa Occidental, pero los precios al consumo han subido casi un 38% interanual y los salarios brutos medios superan ligeramente los 600 euros al mes).
¿Cuánto más asequible es alquilar una casa?
Alquilar una casa o un apartamento también se encareció mucho en toda Europa, aunque aumentaron a un ritmo más lento que los precios. Según los últimos datos disponibles de Eurostat, los alquileres aumentaron un 26,7% en la UE, entre 2010 y el cuarto trimestre de 2024.
Sin embargo, hubo países en los que los precios de los alquileres aumentaron muy por encima de la media. Estonia experimentó el mayor salto en los precios de los alquileres, que se triplicaron con creces (+212%) en comparación con su nivel en 2010), en Lituania, el alquiler se encareció un 175% y en Islandia, los precios crecieron un 120%.
En Hungría, los precios del alquiler son más del doble (+114%) de lo que eran en 2010. Grecia se encuentra al final de esta lista, donde los precios del alquiler son un 13% más baratos en el mismo periodo. Mientras tanto, en Turquía, los precios de los alquileres son casi 8,8 veces superiores a los de hace una década, según los últimos datos de la OCDE.
Costes de la vivienda: ¿dónde son los más altos de la UE?
Los costes de la vivienda, incluido el pago de los servicios públicos, también aumentaron sustancialmente en muchos Estados miembros de la UE. Entre 2015 y marzo de 2025, los estonios registraron el mayor aumento del coste de la vivienda de todo el bloque. Pagaron algo más del doble que diez años antes.
A Estonia le siguieron Polonia y la República Checa, que registraron unos costes de vivienda en torno al 180% de los de 2015. En la UE, de media, estos precios aumentaron más del 40% en el mismo periodo.
Dentro del bloque, la menor subida se registró en España, apenas por encima del 20%. Sin embargo, Albania, que está a punto de ingresar en la UE, registró un aumento aún menor.
Si se compara el coste de la vivienda con la media de la UE, Irlanda encabeza la lista de países más caros, según los últimos datos (2023) de Eurostat. En Francia y Alemania, este coste fue algo superior; en Italia y España, algo inferior a la media de la UE.
Los malteses y húngaros pagaban sólo dos tercios de la media de la UE, y los búlgaros se situaban al final de la lista, con algo menos del 40%. Los elevados precios del alquiler y la vivienda son en parte culpables de que muchos jóvenes europeos no puedan abandonar el hogar paterno durante años después de empezar a trabajar.
Según Eurostat, los jóvenes europeos abandonan el hogar paterno por término medio a los 26,3 años. Este dato varía significativamente entre los países de la UE, desde los 21,4 años de Finlandia hasta los 31,8 de Croacia.
¿Dónde se invirtió más en propiedades?
En 2023, los chipriotas invirtieron en propiedades el equivalente al 8,6% del PIB del país, según Eurostat. En Italia, esta tasa fue del 7%, ligeramente superior a la de Alemania (6,9%) y Francia (6,4%).
La tasa más baja se registró en Polonia (2,2% del PIB) y Grecia (2,3%). La inversión media en vivienda en la UE se situó en el 5,8% del PIB en 2023, aproximadamente un billón de euros.