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Todo lo que debes saber sobre algunos de los aeropuertos más peligrosos del mundo

Rebecca Ann Hughes
31/03/2025 07:20:00

Aunque Madeira es un destino vacacional de ensueño, llegar a la isla puede resultar una experiencia algo inquietante. El aeropuerto de Funchal está considerado uno de los más peligrosos del mundo para volar. Esto puede significar que los aterrizajes sean accidentados o que los vuelos sufran retrasos y cancelaciones si el tiempo no acompaña.

Sin embargo, esto no debería disuadir a nadie de viajar allí, ya que los pilotos han recibido una formación experta para hacer frente a las difíciles condiciones. Zbigniew Mlotkowski, director de formación de tripulaciones de la aerolínea chárter lituana KlasJet, explica cómo se preparan los pilotos para los despegues y aterrizajes más difíciles y lo que ello significa para los pasajeros.

Pistas cortas y montañas cercanas: ¿Qué es lo que hace peligroso a un aeropuerto?

Los aeropuertos se clasifican como peligrosos en función de varios factores. Uno de los principales es el terreno. Las montañas circundantes suelen dificultar los aterrizajes, lo que obliga a los pilotos a emplear procedimientos especiales.

Las condiciones meteorológicas también son importantes, ya que los fuertes vientos combinados con colinas y montañas pueden provocar turbulencias. Los vientos cruzados pueden afectar al manejo y control de la aeronave, mientras que las microrráfagas crean repentinas corrientes descendentes que hacen perder altitud a las aeronaves.

Las dimensiones de la pista también desempeñan un papel crucial. Una pista corta y estrecha requiere una gran pericia por parte del piloto para mantener la trayectoria de llegada.

Europa alberga dos de los aeropuertos más peligrosos del mundo

El aeropuerto de Funchal (FNC), en Madeira, es conocido por su desafiante pista. Un extremo está construido sobre pilares de hormigón con un terreno cercano a una fuerte pendiente. El otro extremo está cerca de acantilados, lo que obliga a los aviones a permanecer fuera de la línea de aproximación central hasta que están a punto de aterrizar.

Los vientos de las montañas cercanas crean turbulencias locales, que a menudo provocan retrasos o cancelaciones de vuelos. El verano pasado, los fuertes vientos obligaron a cancelar o desviar más de 80 vuelos durante un periodo de tres días en agosto.

Otro aeropuerto conocido por las difíciles condiciones de sus pistas es el de Innsbruck (IIN), en Austria. Este está situado en los Alpes, en un valle rodeado casi por completo de altas montañas rocosas. Esto obliga a seguir procedimientos especiales durante la aproximación y el aterrizaje. Cualquier pequeña desviación de la trayectoria preestablecida puede acercar el avión a las montañas, afectando potencialmente a la seguridad.

Los pilotos reciben una formación rigurosa para sobrevolar aeropuertos complejos

Cada aeropuerto requiere un manejo hábil y cálculos muy precisos para garantizar que la seguridad del vuelo no se vea comprometida en diferentes condiciones meteorológicas. "Se requieren procedimientos especiales para cada fase del vuelo, como la aproximación, el aterrizaje y la aproximación frustrada, que deben ser ejecutados por los pilotos si por alguna razón el avión no puede aterrizar", explica Mlotkowski. "Suele haber procedimientos especiales diseñados para este tipo de aeropuertos, que permiten continuar el vuelo con seguridad, incluso con un solo motor en funcionamiento".

Para familiarizarse con los aeropuertos complicados, los pilotos deben recibir formación en simuladores. Esto les permite poner en práctica la experiencia previa y los conocimientos teóricos en condiciones seguras.

"El simulador ofrece una visualización detallada de todos los objetos naturales y construidos por el hombre en las inmediaciones del aeropuerto, lo que prepara a los pilotos para el vuelo en el aeropuerto real", dice Mlotkowski. "Además, existe la posibilidad de ensayar con todos los posibles fenómenos meteorológicos aplicables a determinados aeropuertos, de modo que los pilotos pueden mejorar sus habilidades y estar preparados para realizar un vuelo seguro en las peores condiciones meteorológicas".

Los aeropuertos complejos requieren expedir una autorización especial para los instructores, que deben obtener antes de poder impartir formación a otros pilotos. "La normativa europea exige formación recurrente tanto teórica como práctica para los pilotos cada 12 meses. Sin embargo, en los aeropuertos muy complejos, la validez de esa formación se reduce a seis meses, para garantizar que los conocimientos y habilidades están al más alto nivel", dice Mlotkowski.

¿Debe preocuparle volar a un aeropuerto peligroso?

A los viajeros puede preocuparles volar a un aeropuerto considerado peligroso, y hay que tener en cuenta algunas cuestiones de comodidad y conveniencia. Los aeropuertos rodeados de montañas son propensos a las turbulencias, que pueden hacer que los aterrizajes sean irregulares.

Según Mlotkowski, las pistas más cortas pueden hacer que el aterrizaje no siempre sea suave, o lo que en la jerga del sector se conoce como "aterrizaje positivo". Skiathos (Grecia), Florencia (Italia) y Bilbao (España) son algunos de los lugares donde los pasajeros pueden experimentar esta situación. Los aeropuertos más exigentes, en los que el tiempo es un factor de seguridad importante, también pueden sufrir retrasos más frecuentes, ya que los horarios se ajustan temporalmente para evitar condiciones potencialmente peligrosas.

Los pasajeros también pueden sufrir retenciones cuando un avión tiene que esperar un tiempo en el aire a que se produzca un cambio meteorológico que le permita aterrizar con seguridad. En ocasiones, si la espera se prolonga y se quema demasiado combustible de reserva, el piloto puede tomar la decisión de desviarse a un aeropuerto alternativo.

Sin embargo, Mlotkowski subraya que se toman todas las precauciones posibles para garantizar que se navega con seguridad por pistas y condiciones meteorológicas difíciles. "Todos los pilotos están formados, tienen experiencia y están bien preparados para garantizar que nuestro trabajo se hace de forma segura y profesional", afirma. "Es nuestra forma de vida".

por Euronews Spain