Podemos decir con seguridad que el teletrabajo ha cambiado muchas cosas en nuestra vida diaria, y una de las más evidentes tiene que ver con lo que buscamos a la hora de elegir cuál será nuestra nueva vivienda.
En muchos casos, antes una de las prioridades que podíamos tener a la hora de elegir una vivienda era estar cerca del trabajo. Pero ahora, con la posibilidad de trabajar desde cualquier sitio, los criterios de búsqueda, en muchas ocasiones, han cambiado.
Los inquilinos buscan apartamentos amueblados a corto plazo en Barcelona o en cualquier otra ciudad española pensando en que se adapten mejor a su nueva forma de trabajar y al estilo de vida que tienen en la actualidad. Pero, ¿qué aspectos se están valorando más ahora? Vamos a verlo.
¿Qué buscan ahora más los inquilinos en la era del teletrabajo?
1. Espacios más amplios y funcionales
En primer lugar, tenemos que hablar del espacio. Ahora que pasamos más tiempo en casa, el espacio se ha convertido en un factor muy influyente a la hora de elegir. Ya no solo importa tener una vivienda bonita, sino también una que sea más funcional y sobre todo más cómoda.
Los inquilinos buscan pisos con más habitaciones que se puedan usar como oficinas, con habitaciones bien iluminadas y con una distribución en la vivienda tal que permita separar en cierto grado la vida laboral de la personal.
2. Conexión a internet de alta velocidad
Parece obvio, pero este punto es clave. Una conexión estable y rápida en una vivienda es básica para la persona que teletrabaja. Por esta razón, por ejemplo, muchos inquilinos valoran que la vivienda tenga una buena fibra óptica o que haya buena cobertura en la zona.
Además, contar con un buen sistema de electricidad con varias tomas de corriente bien distribuidas por la vivienda y algunos espacios adaptados para instalar escritorios se ha vuelto un plus que puede hacer variar la decisión sobre el alquiler de un piso u otro.
3. Viviendas más alejadas del centro
Con la flexibilidad que ofrece el teletrabajo, la necesidad de vivir en el centro de las grandes ciudades ha disminuido. Muchos inquilinos, por el contrario, están optando por mudarse a las afueras en busca de viviendas que cuenten con más espacio y, por supuesto, con más tranquilidad.
Los barrios con más zonas verdes, con una buena conexión de transporte público y con otros servicios básicos se han vuelto cada vez más atractivos. De hecho, hay personas que incluso han decidido mudarse a pueblos remotos o ciudades pequeñas, donde la calidad de vida es mejor y donde el coste de la vivienda es más barato.
4. Viviendas con espacios exteriores: terrazas, jardines y balcones
Otro cambio importante es la búsqueda de espacios al aire libre dentro de la misma vivienda. Muchos se acuerdan de lo que vivimos hace unos años con el confinamiento y, desde entonces, los balcones o terrazas se valoran más que nunca.
Ahora, hay muchos inquilinos que priorizan la búsqueda de apartamentos con balcones o con jardines donde puedan trabajar tranquilamente, relajados al aire libre, incluso usar estos espacios para relajarse o incluso hacer ejercicio en casa.
5. Viviendas con eficiencia energética
El hecho de pasar más horas en casa también ha hecho que nos fijemos más en los gastos de luz, de calefacción o del agua. Las viviendas que cuentan con una buena eficiencia energética, con algunas mejoras, como ventanas de doble acristalamiento, electrodomésticos de bajo consumo o incluso paneles solares, se están convirtiendo en una opción muy valorada por los inquilinos.
6. Edificios con zonas comunes adaptadas
Las urbanizaciones con espacios compartidos también han ganado popularidad. Zonas de coworking dentro del mismo edificio, gimnasios, jardines o salas de reuniones son unas características muy valoradas por los que teletrabajan.
Tener la posibilidad de salir de la vivienda sin tener que desplazarse demasiado es un extra que muchos buscan en su nueva vivienda.
7. Flexibilidad en los contratos de alquiler
El teletrabajo también ha hecho que la movilidad sea mucho mayor. Ahora, muchas personas buscan contratos de alquiler más flexibles, que les permitan mudarse con facilidad si sus circunstancias cambian.
Las plataformas de alquiler de viviendas han empezado a ofrecer opciones con una permanencia más corta o incluso alquileres temporales con más servicios incluidos, adaptándose a este nuevo tipo de inquilinos, como los nómadas digitales.
8. Viviendas amuebladas y listas para entrar a vivir
Otra tendencia clara es la búsqueda de viviendas completamente equipadas. Con el teletrabajo, las mudanzas han aumentado y muchas personas prefieren no complicarse demasiado la vida comprando muebles o electrodomésticos.
Un piso bien decorado, con todo lo necesario para instalarse desde el primer día, tiene mucha más demanda que uno vacío.
9. Comunidad y servicios añadidos
Muchos inquilinos también están empezando a valorar vivir en entornos donde exista cierto sentido de comunidad. Algunos edificios de alquiler ofrecen espacios comunes donde las personas que viven allí pueden conocerse, compartir sus experiencias o incluso trabajar juntos.
Además, los servicios añadidos como una limpieza semanal, un servicio de mantenimiento o incluso la asistencia técnica se han convertido en grandes atractivos para una vivienda. Vivir en un lugar que no solo cubra tus necesidades básicas, sino que también te facilite el día a día, es una gran diferencia.
Por último, queremos mencionar algo que sin duda está siendo una gran ayuda para los propietarios e inquilinos a la hora de encontrar una vivienda de estas características. Hablamos de las plataformas digitales que han transformado el modo en que buscamos y alquilamos vivienda.
Estas herramientas permiten filtrar propiedades según tus prioridades: si necesitas un despacho en casa, si buscas tener cerca algunas zonas verdes o si tu prioridad es la conexión a internet.
Algunas incluso incluyen visitas virtuales, lo que agiliza mucho el proceso de decisión.
Además, permiten gestionar todo el proceso de manera sencilla: desde firmar el contrato, hasta solicitar reparaciones o pagar el alquiler de forma automática.
Este tipo de servicios ha crecido en popularidad entre los nuevos teletrabajadores, que valoran especialmente la comodidad y la posibilidad de cambiar de ubicación sin complicaciones.